Siria, destaca por ser un crisol de historia y cultura. Es el único árabe con una constitución laica, reflejando su diversidad y tolerancia. Las mujeres sirias no tienen la obligación de cubrirse el rostro con velo, burka o chador, reflejando un enfoque más progresista en cuanto a la vestimenta. La tolerancia religiosa es notable, ya que ha dado origen a cinco papas. Con un legado que se remonta a más de 15,000 años antes de Cristo, Siria es la cuna de las civilizaciones más antiguas del mundo, evidenciado por su capital, Damasco, la ciudad continuamente habitada más antigua. A pesar de su aparente tamaño pequeño, la influencia de Siria es universal, gracias a su ubicación estratégica que ha sido punto de encuentro entre oriente y occidente a lo largo de la historia. Además, Siria alberga la biblioteca más antigua del mundo, un tesoro cultural que resalta su importancia histórica. Sumado a todo esto, la fusión de diversas culturas, como la helena, romana, bizantina, otomana e islámica, ha dotado a Siria de un carácter único y justificado su reputación como la cuna de las civilizaciones.